Por mayores costos y menor competitividad, el país perdió este año su
histórico tercer lugar en el podio y cayó al quinto puesto.
Buenos Aires, Argentina, 28 de octubre del 2012.- Este año, la Argentina quedó relegada al quinto
lugar en el ranking de exportadores latinoamericanos. Los datos del primer
semestre muestran que el país fue superado en esa escala por Venezuela y Chile.
Por la suba de costos y la pérdida de competitividad, las ventas externas
argentinas cayeron en un contexto en el que la mayoría de nuestros vecinos
consiguió exportar más.
En los últimos años, la
Argentina se había consolidado en el tercer puesto de la lista latinoamericana
de mayores exportadores, detrás de México y Brasil, según refleja el ranking
que la consultora DNI construyó sobre la base de datos de la CEPAL, el Banco
Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial. Para homogeneizar las
comparaciones, DNI toma los registros del primer semestre, que muestran una
caída interanual del 1,1% en las ventas locales. El último dato del INDEC,
correspondiente a septiembre, evidencia una performance aún peor, una merma del
3% en el acumulado de los 9 meses (ver infografía).
Así, las exportaciones
argentinas, que según la lectura oficial retroceden porque “el mundo se nos
cayó encima”, van a contramano del desempeño promedio de la región, que en ese
período exhibe un crecimiento del 4,1% en ese rubro. Un detalle llamativo es
que, en el semestre pasado, las exportaciones mundiales crecieron un 1,3%.
“Latinoamérica exhibió una performance de notable mejor resultado que el
promedio mundial, lo que Argentina no ha aprovechado”, señala Marcelo Elizondo,
director de DNI.
Algo similar ocurre con
las importaciones, que –restricciones mediante– cayeron en el país 7% en el
semestre, contra un alza en la región del 6,7%. “La Argentina ha mostrado una
vez más –como en 2010 y 2011– una de las peores performances en la evolución
exportadora comparada con la región”. El país decreció 1,1% en comparación con
el primer semestre del año anterior. En ese período, Colombia aumentó el 11,3%,
Uruguay subió 10%, Ecuador trepó 9,9%, Venezuela se expandió 7,8%, México
creció 7,6% y Perú lo hizo 1,4%. “Hasta Brasil, que ha descendido, lo hizo en
un número no tan malo como la Argentina (-0,9%)”, indica Elizondo. Sólo Chile y
Paraguay tuvieron desempeños peores, pero aun así el país transadino consiguió
escalar posiciones en el ranking.
Desde la óptica de
Elizondo, en este retroceso de las exportaciones argentinas influyen el aumento
de costos, el atraso cambiario y la pérdida de competitividad. Entre los
sectores más afectados por estos factores figuran químicos, plásticos y
aparatos eléctricos.
Para algunos rubros la
situación se agravó también por la decisión del Gobierno de obligar a las
empresas a adelantar las liquidaciones de las exportaciones. Uno de los más
afectados por este punto fue la minería. Y un tercer factor importante para
explicar la caída de las exportaciones fue la sequía que redujo el volumen de
la cosecha agrícola.
Estos elementos formaron
el cóctel que llevo al comercio exterior argentino en dirección opuesta al
rumbo que traía hasta hace 4 años. Entre 2002 y 2008, las exportaciones
crecieron a tasas de dos dígitos. “Desde 2009 se amesetaron porque la tasa de
inversión en la Argentina es baja (ver aparte) y hay dificultades para
incrementar la oferta exportable sin invertir más”, apunta Elizondo.
“Las ventas externas
pierden impulso debido a que el rubro cereales deja de tener el rol positivo
que tuvo a principios de año. Además, los efectos de la última sequía se
observan más claros en las exportaciones vinculadas a la soja”, indican desde
la consultora ACM. A esto se agrega que las ventas de productos industriales se
mantienen en terreno negativo, un 12% por debajo del máximo del año pasado que
se había alcanzado en octubre.
Según Martín Clause,
economista del IERAL, con la contracción de 12,4% y 14,2% de las exportaciones
e importaciones de septiembre, “se profundiza el fenómeno de merma en la
apertura comercial de la economía”. En 2011, la apertura comercial, medida como
la suma de las exportaciones e importaciones como porcentaje del PBI, fue de
35,7%. En el acumulado de 12 meses, este ratio se redujo a 32,5%. De continuar
la tendencia, este año finalizaría en un nivel cercano al 31%. El máximo de apertura
comercial se registró en 2008, cuando alcanzó el 39,2%. “La restricción de
importaciones termina desincentivando las exportaciones vía apreciación
cambiaria, la falta de insumos para la producción y las eventuales
retaliaciones de nuestros socios comerciales”, dice Clause.
Mariano Lamothe, de la
consultora abeceb.com, indica que entre los sectores con menores exportaciones
se encuentran los automóviles. “Las ventas estuvieron especialmente afectadas
por la menor demanda de Brasil, principal destino de estos productos. A esto se
adiciona la pérdida de competitividad asociada al aumento de los costos
internos”, cuenta. Entre los afectados por causas locales, menciona el caso del
aluminio en bruto. “Se vieron afectados por el efecto negativo que tuvo sobre
la capacidad productiva la inundación de una usina eléctrica de Aluar, en
noviembre de 2011”. En el caso de naftas, gas natural licuado, gas licuado de
petróleo y gas propano, “hubo menos saldos exportables por las necesidades
internas de abastecimiento”.
Fuente: 1Eco