Para Cancillería, Estados Unidos
“dilata negociaciones”
Buenos Aires, Argentina, 24 de
agosto del 2012.- En un nuevo
cruce con los Estados Unidos por el reclamo ante la Organización Mundial de
Comercio, la Cancillería respondió ayer a la "sorpresa" que manifestó
el vocero del departamento de Comercio estadounidense y destacó que el país
viene reclamando "durante casi una década" sobre los requisitos
fitosanitarios de Washington. Fuentes oficiales consideraron que Estados Unidos
se dedicó a dilatar las soluciones.
La decisión de llevar
ante la OMC las trabas comerciales que impiden el ingreso de carnes, limones y
otros cítricos al mercado estadounidense se justifica por las negociaciones
"sin éxito" según la Cancillería.
"Es evidente que las
trabas impuestas a los productos argentinos son parte de una política
proteccionista inconsistente con las normas de la Organización Mundial del
Comercio", reiteró el área a cargo de Héctor Timerman.
A través de un
comunicado, la Cancillería sostuvo que "las propias estadísticas de la OMC
muestran que el gobierno de Estados Unidos ha sido el destinatario de una de
cada cuatro controversias por barreras comerciales planteadas por los países
miembros de la OMC ante su Tribunal".
China, por ejemplo,
anunció ayer que pedirá a la OMC que se pronuncie sobre la disputa por los
aranceles de importación punitivos establecidos por Estados Unidos sobre 22
exportaciones chinas, que incluyen paneles solares y productos de acero, en una
medida que agudiza la pugna entre las dos grandes economías.
SUBSIDIOS. El Gobierno
cuestionó además los u$s120.000 millones anuales que Estados Unidos dirige a
subsidiar directamente a su sector agrícola. "Esta transferencia de
recursos impide el desarrollo de un comercio mundial más equilibrado y justo. El
reclamo por los subsidios forma parte de la negociación que a gran escala
divide a emergentes y desarrollados en la llamada Ronda de Doha, un ámbito de
negociación dentro de la OMC que tiene como objetivo 'liberalizar el comercio'
pero con la condición de favorecer a los países en desarrollo, un toma y daca
completamente estancado desde 2008.
Para la Argentina, esos
subsidios generan distorsiones que desalientan la producción en otros países
que pasan a ser menos competitivos, por lo que también son considerados una
forma de "proteccionismo".
La sorpresa del
representante de Comercio estadounidense alude, en tanto, a una suspicacia que
circula en el ambiente diplomático: que la negociación se estaba llevando
adelante y que la queja formal fue en represalia al reclamo de Washington por
las medidas de comercio administrado como licencias no automáticas,
declaraciones juradas anticipadas de importación y la compensación de la
balanza comercial de cada empresa, entre otros puntos.
"La Argentina es el
primer productor mundial de limones. Vendemos limones a Europa, Asia y África.
Sin embargo, ni un solo limón argentino puede ingresar al mercado
estadounidense. Eso es proteccionismo", ponderó el diplomático.
Para el ex negociador de
la Cancillería, Raúl Ochoa, a nivel mundial las restricciones van por el lado
de las normas técnicas y fitosanitarias. "La Argentina en cambio toma
restricciones generales. Eso hace que sea más fácil identificarlas como una
restricción", explicó.
Para el especialista, la
protección debería ir "mucho más allá de las restricciones. Lo que se
busca es desarrollar una industria". En ese sentido, puso como ejemplo a
Brasil, que estableció exigencias técnicas que requieren la certificación de
normas, por ejemplo, para el sector automotriz. "Las normas técnicas están
en permanente evolución y eso obliga a adaptarse", indicó Ochoa.
Fuente: BAE