Demandas de extrabajadores portuarios, Oceanografía y alumnos de Escuelas de FIDENA, serán atendidos: AMLO
Pulido Cueto será atendido por SEGOB y Vocero Presidencial el viernes en Veracruz Comentan que sus manifestaciones acabarán; pero amenaza en tomar el SAT el viernes Seguidores de Pulido, están contenta, pero olvidan que con Adán Augusto no se juega Foto: Reportes al Momento
Por Raúl Hernández Rivera
Ciudad de México, a 19 de abril del 2022.- Las modificaciones a más de 34 Artículos de la Constitución, así como a leyes y sus reglamentos, sobre todo en materia económica, y la creación de nuevas leyes como la de Puertos, fueron la base para convertir a todo el andamiaje legal y jurídico del país en el nicho de la corrupción que hoy tanto nos lastima.
Carlos Salinas de Gortari lo había planeado desde la dirección del Instituto de Estudios Políticos, Económicos y Sociales (IEPES) del PRI en 1979. Y así despojó al país de sus recursos y a los trabajadores de sus derechos laborales; los más afectados fueron los del sector comunicaciones y transportes, es decir, la columna vertebral de la economía, así se le dijo al Presidente López Obrador el pasado lunes 18 en la Conferencia matutina en Palacio Nacional.
Ferrocarriles, carreteras, autotransporte federal, Teléfonos de México, puertos… todo lo vendió. O más bien, como algunos colegas dijeron cuando en 1988 leyeron ¡México for sale!: “te equivocaste, no lo vendió, lo compró”.
En ese contexto, se llevó a cabo la privatización de los servicios a la carga y a los buques de los puertos mexicanos. La privatización portuaria iniciada con la requisa del puerto de Veracruz el 1 de junio de 1991 mediante la “Operación Corsario”, nombrada así por el entonces director de Puertos Mexicanos, Roberto Ríos Ferrer.
Previamente, Salinas había reunido a los empresarios involucrados en el sector: navieros, agentes aduanales, comercializadores.
Al mandatario lo ayudaron su titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Andrés Caso Lombardo; el director de Puertos Mexicanos, Roberto Ríos Ferrer, el gobernador interino, Dante Delgado Ranauro hoy senador, y a quien Salinas manejaba a su antojo quien solo se limitaba a sonreírle al Presidente sin chistar. Cuando Delgado Ranauro recibió a Salinas en la reunión concertada con empresarios en la que el gobernador interino había gastado una fortuna del erario estatal, le dijo que ya tenía el candidato idóneo para Veracruz, pero Salinas le dijo enérgico: no se equivoque Dante, Será Gustavo Carbajal Moreno, ¿me entiende?
Dante Delgado se pasaba el tiempo en las reuniones políticas, tocando el hombro de sus elegidos y les decía: “Estas en mi proyecto”; hoy sabemos cuál era ese proyecto.
La estatura de Dante Delgado contrastaba con la de Salinas, más por su actitud servil del ahora senador y líder de Movimiento Ciudadano, frete a la prepotencia y arrogancia del Presidente. Obedeció en todo lo que Salinas le pidió.
Salinas ordenó a sus colaboradores reunir a conocidos así como amigos de cada uno de ellos, para concertar la “Privatización Portuaria”. Ríos Ferrer incluyó a los líderes sindicales que traicionaron a la Unión Nacional de Organizaciones Portuarias (UNOP), como Cecilio Lepe Bautista, quien había jurado no ceder ante la embestida privatizadora de Salinas; incluso buscó reunir todo el capital de la Unión de Estibadores y Jornaleros del Pacífico, para comprar el puerto de Manzanillo, si Salinas privatizaba las terminales marítimo-portuarias. Lo dijo a los medios y a todos los políticos con quienes tenía relaciones cercanas.
Los primeros meses de 1991, era frecuente ver a Cecilio Lepe junto con sus agremiados, en la sala de espera de la dirección de Puertos Mexicanos en el edificio de Emiliano Zapata y Av. División del Norte. Ahí se la pasaban horas esperando a Roberto Ríos Ferrer.
Otro personaje “utilizado”, fue el sonorense Misael Bretón, quien fue representante para América Latina del Puerto de Houston.
Roberto me pidió que lo ayudara, contó. Oye Misael, si fuiste capaz de llevarte gran parte de las cargas mexicanas para el puerto de Houston, ayúdame a regresarlas, dice que le dijo Ríos Ferrer.
Cuando en el mundo se mueve más del 80% de cargas de importación y exportación por la vía marítima, México mueve poco más del 31% por esa vía, el resto se mueve 55% por carretera, 12.8% por ferrocarril y un lejano 0.1% por vía aérea. Eso es en gran parte a la labor que desarrolló Misael Bretón.
Y es que Misael Bretón realizaba reuniones con industriales y empresarios productores exportadores e importadores exitosos nacionales y extranjeros en México. Les pagaba todo, hotel, comidas, bebidas, transportes, para convencerlos la utilización del puerto de Houston, en lugar de los puertos mexicanos en la costa del Golfo de México. Muchos se resistían por lo lejano del puerto, pero los convencía por los bajos rendimientos en las maniobras de los puertos mexicanos, sobre todo el de Veracruz en el que prevalecía la corrupción y los robos hormiga, pero también desaparecía cargas completas.
Qué decir del maltrato a las mercancías, se llegó a ver que los maniobristas utilizaban un gancho para mover las bobinas de papel periódico que importaba PIPSA, maltratándolo severamente con enromes perdidas para los periódicos editados en varias partes del país.
Con arrogancia, los trabajadores sindicalizados, maltrataban a los trabajadores eventuales con largas jornadas bajo el quemante Sol en los muelles. Solo así se explicaba la poca voluntad de realizar un trabajo eficiente, limpio, esmerado en beneficio de los usuarios del puerto.
Pero eso no ha cambiado en gran parte, pues los sindicatos en el puerto logran contratos colectivos de trabajo mediante los cuales los líderes explotan a los trabajadores obligándolos a jornadas pesadas y riesgosas sin un salario que los compense.
Hay que agregar que las plazas de trabajo son vendidas o alquiladas por los líderes de los sindicatos.
Con el alboroto de Alejandro Pulido Cueto quien, pese a tener concertada la reunión con Adán Augusto López, Secretario de Gobernación, y con Vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez, fue a las oficinas de la Fiscalía General de la República en Veracruz, para amagar a las autoridades.
Manifestación de extrabajadores portuarios
Video de Reportes al Momento (De clic aquí para ver el video)
Igualmente lo hizo el martes 19, pero ahora en las oficinas de ASIPONA de Veracruz, en donde, auxiliado por policías de tránsito y supuestos socios del Sindicato de Maniobristas, mandó cerrar el paso en el puente Morelos, “solo es una manifestación pacífica porque queríamos hacer un poco de presión…”
Las injustas e inhumanas condiciones laborales en los puertos no han cambiado en más de 30 años, después del 1° de junio de 1991. Incluso los intentos por la humanización de las maniobras de cargas en los puertos, y el trabajo de las tripulaciones de los barcos ha empeorado con la pandemia, pues llegaron a soportar más de ocho meses sin poder bajar a tierra firme por las restricciones sanitarias aplicadas para tratar de controlar el contagio del COVID-19. Estas medidas provocaron el aumento en el costo de los contenedores y severos rezagos en la recepción y despacho de mercancías en los puertos hoy saturados en extremo.
En los puertos mexicanos operaban las Empresas de Servicios Portuarios de forma tripartita, trabajadores portuarios, empresarios navieros y agentes aduanales y el gobierno federal a través de la Comisión Nacional Coordinadora de Puertos, excepto Veracruz, en donde los trabajadores ostentaban el mayor porcentaje de las acciones de SERPOVER, concedido por Luis Echeverría Álvarez en la implementación de la “Reforma Portuaria”.
Por eso los trabajadores portuarios, principalmente los integrantes del Sindicato de Maniobristas hacían lo que querían y prácticamente la corrupción en el puerto jarocho no se había acabado del todo.
Esa fue la escusa y pretexto de Salinas para privatizar los servicios a la carga y los buques de los puertos mexicanos.
Después del primero de junio de 1991, en una habitación del tercer piso del hotel Veracruz utilizada para para amenazar de muerte y fustigar a los trabajadores portuarios, junto a Ríos Ferrer, Caso Lombardo, el director de la Policía Federal, y de la temida Federal de Seguridad de la SEGOB a cargo del exgobernador veracruzano Fernando Gutiérrez Barrios, se sumaba Dante Delgado Ranauro.
Los trabajadores portuarios, otrora dueños y señores de la empresa, habían sido sometidos. El director de Servicios Portuarios de Veracruz, Antonio Saracho Zapata preso en el penal “Ignacio Allende” (en la manzana de las Av. Hernán Cortes, Francisco Canal, Nezahualcóyotl e Ignacio Allende del Centro Histórico de la Cd. De Veracruz), concedió una entrevista mediante comunicación con su joven esposa. El día citado, Saracho Zapata no pudo recibir al reportero. Su esposa pidió posponer la visita para el día siguiente a la misma hora: 7:00 horas de la mañana.
Para aprovechar la estadía y objetivo del viaje, fue solicitada una entrevista con Roberto Ríos Ferrer, quien se encontraba acuartelado en las oficinas de SERPOVER. Nos recibió amablemente y después de responder varias preguntas, dijo: ¿qué más vas a hacer? …para pedirle a Sara Moirón (jefe de prensa de Puertos Mexicanos) que te atienda, que te den un vehículo para que te muevas ¿en dónde estás hospedado?, lo que necesites, estimado Raúl…
Decliné sus ofertas, pero insistió en proporcionarme un vehículo. Tratando de escabullirme, le dije: sólo tengo dos citas hoy y serán en la Parroquia. Mañana muy temprano otra entrevista y es todo.
¡Pues que te lleven! No faltaba más. ¿a qué hora y en donde quieres que te recojan mañana?
A las 7 de la mañana tengo que estar en el Penal para ver a Saracho, se le dijo.
Al día siguiente llegó un empleado enviado por Ríos Ferrer y para el traslado al penal Ignacio Allende. Al intentar el ingreso para la entrevista, informaron que Antonio Saracho había muerto media hora antes.
La única persona que sabía que iba a entrevistar a Saracho era Roberto Ruiz Ferrer.
Desde entonces, solo muertes, despojos, engaños, mentiras, burocratismo, para los trabajadores portuarios, principalmente para los maniobristas.
Desde que el entonces gobernador interino Dante Delgado se reunía con el director de la Policía Federal, Roberto Ruiz Ferrer, y otros para amedrentar a los trabajadores portuarios, principalmente a los líderes, a fin de que se desistieran.
Líderes como Pedro Miranda, habían conseguido el respaldo de los trabajadores portuarios de la costa este de Estados Unidos los cuales habían ya prometido parar los puertos estadounidenses en apoyo a los veracruzanos para que se revirtiera el paro a la empresa Servicios Portuarios; sin embargo, no sucedió, los amenazaron fuertemente en una habitación del tercer piso del hotel Veracruz, ahí donde se llevaban a cabo las reuniones.
¿Esto por qué se lo digo?
Por lo siguiente: ya en 2020 en una Conferencia Matutina celebrada en el Palacio del Ayuntamiento con la jefa de gobierno, le expuse la problemática de los trabajadores portuarios de Veracruz. Usted instruyó a la secretaria de Gobernación, entonces Olga Sánchez, y ella muy amablemente nos citó para una reunión a la siguiente semana.
Vino el entonces secretario general del sindicato de Maniobristas, René Bustos Vilorio, junto con Pedro Segura, y el abogado Juan Guevara, enviado por el diputado Carranza Arias de Morena. Y sí, se concertó la cita con la secretaria, pero los veracruzanos habían llevado también al diputado y a otras personas que no sabíamos qué. Se molestó mucho el secretario de la Secretaría de Gobernación, porque solo estaban apuntadas cinco personas, pero bueno, nos recibieron.
Sin embargo, fue todo muy atropellado porque el abogado Guevara nunca presentó lo que habían dicho que iban a presentar. Quedaron de llevarle a la secretaria Sánchez Cordero un escrito pormenorizado, pero nunca lo entregaron, lamentablemente.
Y hoy pasados los años, pasados los años, se vuelve a buscar la intervención de usted para arreglar el asunto de los trabajadores portuarios de Veracruz en aquella injusta requisa, un desmantelamiento del trabajo de esta gente que sí ha pasado más de 30 años y están muy mal.
Sin embargo señor Presidente, siguen siendo el mismo problema, los trabajadores portuarios siguen siendo engañados por una persona que ahora se llama Alejandro Pulido Cueto quien se dice apodado legal del actual sindicato y que no resuelve nada. Esta persona que está acusada por despojo agravado, agresiones, despojo de predio y haberles quitado el edificio sindical con lujo de fuerza y agresiones, a la anterior directiva.
Les quitaron todo: archivos, expedientes, documentos, equipo de cómputo, muebles… y sigue engañando a los trabajadores portuarios.
Los trabajadores están muy desesperados, sobre todo los jóvenes que están buscando trabajo y no ven para cuándo. Tanto los anteriores líderes como los actuales los engañan todo el tiempo.
Ellos están pidiendo, no solamente que los escuchen para arreglar su problema, sino que les orienten para ver cómo se organizan, porque ya hay ahora siete nuevas empresas y las plazas, estos señores, estos líderes corruptos, venden las plazas, hacen un negocio, la misma figura de los cuijes que hubo con Echeverría en donde los del sindicato vendían el espacio a otras personas.
Entonces, están buscando eso y la verdad que quieren saber si en un momento dado podrían ser atendidos.
Les he recomendado que hagan una lista, que hagan un trabajo y que busquen cómo para organizarse, ya con el sindicato o sin el sindicato, lo que sea.
Pero sí, están muy desesperados, señor Presidente, porque hay una gran injusticia. Cada vez que los contratan, si no se alinean, los corren y además en unas condiciones de verdad muy lamentables.
Sensible, el Presidente Andrés Manuel López Obrador, dijo a Jesús Ramírez: Adán (Augusto López, Secretario de Gobernación), que le comentes, seguramente ya te escuchó, para que se entrevisten con las personas.
Para esa hora, los contactos de elbarlovento.com.mx, enviaron mensajes para informar el alboroto de Pulido Cueto junto con varios supuestos integrantes de tres sindicatos, estaban en las oficinas de la cede de la Fiscalía General de la Republica protestando y obstruyendo el tránsito vehicular.
El martes hizo lo mismo en el edificio de la ASIPONA de Veracruz, también para protestar.
Los seguidores de Pulido Cueto, están alborotados y muy crecidos, piensan que el gobierno de López Obrador les cumplirá todo lo que les dice su apoderado legal, pero no toman en cuenta que con Adán Augusto López, no se juega, nos dice un joven maniobrista no simpatizante del apoderado legal de Maniobristas.
Por medio de un mensaje, el Vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez, confirmó que el Secretario de Gobernación y él, tendrían una reunión con Alejandro Pulido Cueto el viernes en Veracruz.
Queda pendiente la fecha para la audiencia solicitada con los trabajadores y el titular de SEGOB.
Aquí el texto completo de la versión estenográfica de lo expuesto por El Barlovento, al Presidente López Obrador.
PREGUNTA: Buenos días, señor presidente.
Raúl Hernández, El Barlovento, el concepto integral del comercio exterior.
Señor presidente, hace muchos años que he estado en este asunto de los puertos. Las modificaciones a más de 34 artículos de la Constitución, así como a leyes y reglamentos y luego también leyes nuevas hizo una base para convertir todo el andamiaje legal y jurídico del país en un nicho de la corrupción que hoy nos lastima.
Salinas de Gortari había planeado esto desde el Iepes ¿no?, me queda bien claro a mí, lo investigué y así fue como yo creo, y por eso en ese contexto fue a la privatización de los servicios a la carga y a los buques de los puertos.
Se unió con empresarios, con navieros, agentes aduanales y empresarios privados, y se reunió también con el entonces, en aquel entonces Dante Delgado Ranauro, el gobernador interino, con la Secretaría de Comunicaciones, en el caso Lombardo; Ríos Ferrer, Roberto Ríos Ferrer que era el director de Puertos en aquel tiempo lo que es ahora la Coordinación General de Puertos y Marina Mercante. Y estuvieron ahí prácticamente fraguando para implementar la privatización de los servicios portuarios a la carga y los buques, repito.
Así fue como el 1º de junio de 1991 se efectuó lo que se llamó la Operación Corsario y, pues bueno, sabemos que ha pasado ahí sobre todo con los trabajadores portuarios, una injusticia tremenda.
Y, bueno, también hay que decirlo, y así lo digo yo y espero no ganarme la animadversión de los veracruzanos, se lo ganaron ellos, se lo buscaron, porque era la empresa Servicios Portuarios de Veracruz, a diferencia de las otras empresas creadas por Echeverría, eran la empresa que la mayoría de los accionistas eran los trabajadores portuarios, y sí, no había mucha, mucha legalidad. Sin embargo, esa fue la razón y la causa, el instrumento que buscó Salinas de Gortari para quitarles la empresa.
En mil… Bueno, eso en 1991. Meses, digo, perdón, días después Antonio Saracho Zapata, que era el director de Servicios Portuarios de Veracruz, estaba en la cárcel.
Yo estaba buscando información y la esposa de Saracho me pidió que fuera al penal a Veracruz para entrevistarlo, cosa que, buscando noticia, yo fui con mucho gusto. Llegué, pero no me recibieron en el penal porque tenían algunos trámites con el preso. Me pasé a buscar información, fui a buscar a Roberto Ríos Ferrer, que era el director de puertos, que estaba en lo que es ahora el edificio de la API o Asipona, que le dicen ahora. Me recibió muy bien y ‘perfecto, sí, como no, Raúl, que te atienda, le voy a decir a Sara Morión, que era la jefa de prensa que te dé un vehículo para que te muevas’. Le digo: No, muchas gracias.
—¿Qué vas a hacer? ¿Qué hotel tienes?
—No, muchas gracias.
—¿Qué va a hacer?
—No, pues tengo dos entrevistas y mañana una muy temprano.
—Pues mañana que te lleven donde sea.
—Pues, está muy cerca.
—No, que te lleven. ¿A dónde vamos a ir?
—No, pues voy al penal a buscar a Saracho.
—Pues, cómo no, muy bien.
Me pusieron un Volkswagen —por cierto, muy fregado— y un señor que lo manejaba.
Al día siguiente estuve en el penal, llegué a las 7:00 de la mañana, que me había citado la esposa del hoy difunto y había muerto a las 6:00 de la mañana.
La única persona que sabía que iba a entrevistar a Saracho era Roberto Ruiz Ferrer.
En este contexto de cosas, señor presidente, desde ese entonces, porque, uff, reunía Dante Delgado con el de la Policía Federal, incluso Roberto Ruiz Ferrer, y otros; reunía a los trabajadores portuarios, los líderes, para amenazarlos, para amedrentarlos, para que se desistieran.
Habían conseguido algunos líderes portuarios la simpatía de los trabajadores portuarios de la costa este de Estados Unidos que habían ya prometido parar los puertos estadounidenses en apoyo a los veracruzanos para que se revirtiera el paro a la empresa Servicios Portuarios; sin embargo, no sucedió, los amenazaron, en fin, en el tercer piso del hotel Veracruz, ahí donde se llevaban a cabo las reuniones.
¿Esto por qué se lo digo?
Por lo siguiente: ya en 2020 yo platiqué esto con usted en la conferencia matutina que se efectuó aquí cerca con la jefa de gobierno, usted le dijo a la secretaria de Gobernación, entonces Olga Sánchez, y ella muy amablemente nos citó para una reunión a la siguiente semana.
Vino el entonces secretario general de Gobierno, perdón, secretario general del sindicato, Bustos Vilorio, junto con Pedro Segura, y un abogado que había mandado el diputado Carranza Arias, un diputado de Morena. Y sí, se concertó la cita con la secretaria, y cuando llegamos a la cita estos veracruzanos se habían llevado también al diputado y a otras personas que no sabíamos qué. Se molestó mucho el secretario de la Secretaría de Gobernación, pero bueno, nos recibieron.
Sin embargo, fue todo muy atropellado porque nunca presentaron lo que realmente iban a presentar. Y hoy pasados los años, pasados los años, se vuelve a buscar la intervención de usted para arreglar el asunto de los trabajadores portuarios de Veracruz en aquella injusta… un desmantelamiento del trabajo de esta gente que sí ha pasado más de 30 años y están muy mal.
Sin embargo, siguen siendo el mismo problema, los trabajadores portuarios siguen siendo engañados por una persona que ahora se llama… que es el apodado legal del actual sindicato y que no resuelve nada. Es una persona que está acusada por haber quitado, por haber… ¿cómo se llama?, por despojo agravado, les quitaron el edificio, les quitaron todo, y sigue engañando a los trabajadores portuarios. Los trabajadores portuarios están muy desesperados, sobre todo los jóvenes que están buscando trabajo y no ven para cuándo. Tanto los anteriores líderes como los actuales los engañan todo el tiempo.
Ellos están pidiendo, sí, no solamente que los escuchen para arreglar su problema, sino que les orienten para ver cómo se organizan, porque ya hay ahora siete nuevas empresas y las plazas, estos señores, estos líderes corruptos, venden las plazas, hacen un negocio, la misma figura de los cuijes que hubo con Echeverría en donde los del sindicato vendían el espacio a otras personas.
Entonces, están buscando eso y la verdad que quieren saber si en un momento dado… Yo les he recomendado que hagan una lista, que hagan un trabajo y que busquen cómo para organizarse, ya con el sindicato o sin el sindicato, lo que sea.
Pero sí están muy desesperados, señor presidente, porque hay una gran injusticia. Cada vez que los contratan, si no se alinean, los corren y además en unas condiciones de verdad muy lamentables.
Ese es un caso.
El otro asunto es la respuesta que nos dio la Secretaría de Marina, que lamento decirle, señor presidente, de lo que yo le planteé la vez pasada el 16 de marzo respecto al posible conflicto de interés del director general del fideicomiso, del Fidena, que lleva las escuelas náuticas mercantes.
Contestan… No quiero perder el tiempo, pero la verdad que hay un conflicto muy serio ahí, porque hay un completamente desbandado de gente que está lucrando con la necesidad de los alumnos para matricularse o conseguir la carrera de marino mercante o piloto de puerto o lo que sea.
Y hay una gran corrupción, no solamente en el Fidena, sino también dentro de la Coordinación General de Puertos y Marina Mercante, en donde sí hay conflicto de interés. En el caso del director del Marina Mercante, el capitán Carrillo Mora, que consiguió un trabajo para su hijo. Él era capitán de puerto en Playa del Carmen y consiguió un trabajo para su hijo de piloto de puerto, precisamente en las inmediaciones de Playa del Carmen. Tengo datos y todo para asegurarlo.
Y, por otro lado, en el caso de la escuela náutica de Tampico señalaron a un profesor de base, bueno, destacado, consentido de los alumnos, lo señalaron también como conflicto de interés porque tiene un sobrino y un hermano que trabaja ahí, pero él no los eligió, fueron contratados por la parte; es más, él tiene nueve años y sus familiares tienen seis años. Sin embargo, le han fincado, ya corrieron al joven y al hermano y los dejan sin trabajo.
Y el otro problema que también hay, y urgente y triste, es la proliferación del COVID en la Escuela Náutica Mercante de Veracruz. Tengo reportes y audios de varios padres de familia que incluso también temen mucho, no quieren hablar, porque temen ser maltratados.
Hay jóvenes, incluso una señorita, una muchacha, que han sido golpeados porque han querido protestar, porque no están de acuerdo con lo que están diciendo. Eso en el entorno de, parece, dicen, que hay algo así como 40 infectados en COVID.
¿Qué dice Semar?
Pues nada, dice que no, que todo está muy bien, que todo está muy tranquilo; sin embargo, los padres de familia, tengo audios y tengo firmas de la gente que están pidiendo que no, que les se les haga caso.
Me decía el día de ayer una madre de familia, es nada más la inversión que hacen para ingresar como estudiante de la Marina Mercante, algo así como 35 mil pesos entre uniformes, zapatos, en fin, todo el implemento que hacen, y son internados, lo cual parece que es la mejor fórmula para un trabajo así, para una instrucción así. Sin embargo, dice que no es posible que en esas circunstancias, pagando ese dinero, sus hijos no tengan una garantía de que estén bien atendidos.
Por eso la petición, señor presidente, de, de… Yo sí quiero hablar con el señor secretario y llevarle todo esto porque, la verdad, no, le digo con respeto, no hemos recibido una respuesta.
Está la última, que es lo de Oceanografía. Oceanografía, usted le había pedido la vez pasada fueran los trabajadores de Oceanografía y con sus abogados, que tienen todo el documento, documentos que ya le pasé a Jesús, documentos que bien certifican los problemas que están pasando ahí, que ya tienen mucho tiempo y que siguen utilizando los barcos de Oceanografía para chatarrearlos o para dárselos en custodia, por ejemplo, en Secretaría de Marina, en fin, y no se los dan a ellos como debiera.
Y también la petición que le había hecho yo respecto al capitán de altura, Mendoza Sauceda, otro caso también que está, ahora sí que agazapado; sin embargo, debe muchas, tiene muchos problemas que no ha sido, la gente que quiere recuperar sus cosas y su dinero, no ha sido escuchado.
Y por eso le pido, señor presidente, que ojalá y pudiese, mediante usted, pudiese yo reunirme con el secretario de Marina y llevar documentos y que se puedan atender estas cosas, presidente.
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Muy bien. En los dos casos, Adán, que le comentes, seguramente ya te escuchó, para que se entrevisten con las personas.
Y pedirle también al almirante Ojeda que lo reciba al compañero para que le haga los planteamientos, lo escuche, es el derecho de audiencia.
INTERLOCUTOR: Sí señor, sí señor.