Por Juan Bermúdez
(Tercera y última parte)
Argonmexico/ Con una larga cola de
expedientes sobre operaciones oscuras en la distribución de medicamentos, el
empresario jalisciense Carlos Lomelí Bolaños busca acomodar a Lomedic, su
controversial negocio, en el próximo Gobierno del Distrito Federal (GDF), que
encabezará el exprocurador capitalino Miguel Ángel Mancera, quien se ha
comprometido, ante todo, a la transparencia y probidad en su administración.
Lomelí encontró una especie de paraíso
fiscal en la capital, a partir de la gestión de Andrés Manuel López Obrador al
frente del GDF, (2000-2006), a la par de convertirse en uno de los padrinos
financieros de la aventura política del tabasqueño, al intentar convertirse en
Presidente de la República, en dos ocasiones.
La del empresario de Jalisco, es una
historia no muy alejada de la protagonizada por el constructor de origen
argentino Carlos Ahumada, quien consiguió contratos por adjudicación directa
del gobierno local, en tanto financiaba campañas proselitistas del PRD, como se
evidenció en videos difundidos en 2004 donde aparece René Bejarano al momento
de recibir fajos de billetes en la oficina del próspero constructor, con el
supuesto de apoyar actividades proselitistas.
Carlos Ahumada y Bejarano terminaron
encarcelados, acusados de corrupción, aunque salieron tiempo después. El
argentino volvió a su país, en donde se dice radica actualmente, y Bejarano
regresó a la actividad política pública, dentro del PRD, con Izquierda
Democrática Nacional (IDN).
Los compromisos del otro Carlos,
propietario de Lomedic, con su amigo AMLO se hicieron extensivos a la
administración de su sucesor y al parecer futuro consuegro de Lomelí, Marcelo
Ebrard Casaubón, quien el 5 de diciembre cederá el cargo de jefe de Gobierno a
Miguel Ángel Mancera.
Carlos Lomelí tiene centradas sus
esperanzas en obtener nuevamente la bendición del titular del GDF, en este caso
Mancera, quien se distinguió por su programa de transparencia y probidad
administrativa, cuando fue responsable de la Procuraduría de Justicia del
Distrito Federal (PGJDF).
¿Repetir Vicios?
En estos 12 años de operaciones en la
capital del país, Lomedic ha forjado una negra historia que empieza en Jalisco,
entidad donde se fundó, y se amplía a otras como Nayarit, donde, por ejemplo,
la distribuidora de medicinas resultó relacionada con una denuncia difundida en
medios de comunicación locales, por la presunta adquisición de productos
medicinales con precios alterados, por parte de la Secretaría de Salud estatal.
Pero en el Distrito Federal, ha habido una
especie de paraíso para Lomedic, donde ha contado con la posibilidad de cobrar
facturas por el total de una operación, aunque entregara solamente una parte de
los productos comprometidos, y pusiera a disposición el complemento, tiempo
después.
En el medio de la policía auxiliar del DF,
y dependencias como el Sistema de Transporte Colectivo (Metro) y la Secretaría
de Salud del mismo GDF, se ha mencionado la aplicación de facturas con
sobreprecio –como en Nayarit- hasta de un 50 por ciento, con respecto a la
oferta de otras distribuidoras de medicinas.
En el Metro, Lomedic consiguió en mayo de
2011 un contrato de abastecimiento, por Adjudicación Directa, cuyo monto fue de
200 millones de pesos, y luego otros tres, por unos mil millones de pesos
adicionales, de la Secretaría de Salud capitalina y la Policía Auxiliar.
por ejemplo, el contrato SSDF/DGA/034/2010,
firmado entre la licenciada Bertha María Elena Gómez Castro, directora general
de Administración de la SSDF y la contadora pública Gertrudis Mercado Cruz,
directora de Recursos Materiales de la misma dependencia del GDF, con Lomedic,
representada legalmente por Karina Lucía Navarro Pérez.
En el punto 16 de las declaraciones de
dicho documento oficial, se pone con toda claridad que “(…) el presente
contrato se deriva del Procedimiento de Adjudicación Directa por Excepción a la
Licitación Pública (…)” lo cual contrasta
con el monto, que no es menor, para la adquisición de medicamentos, por
29 millones 996 mil 567 pesos, sin incluir el impuesto al valor agregado (IVA).
En este mar de cosas al parecer indebidas,
que se han registrado durante los últimos años entre Lomedic y el Gobierno del
Distrito Federal que aún encabeza Marcelo Ebrard Casuabón, todo indica que el
asunto resultará de interés para que sea revisado por los nuevos legisladores;
pero para el propio Miguel Ángel Mancera podría convertirse en una papa
caliente.