Tokio, Japón,
14 de octubre del 2012.- El presidente de la
Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), Ben Bernanke, defendió este domingo en
Tokio la política de su institución contra las críticas de quienes la acusan de
generar flujos de capital desestabilizadores hacia los países emergentes.
"La Reserva Federal fortalece su
respaldo financiero a la economía para alcanzar los objetivos de su doble misión:
garantizar el pleno empleo y la estabilidad de precios", declaró Bernanke
en un coloquio organizado por el Banco de Japón y el Fondo Monetario
Internacional (FMI).
"Esta política contribuye no solo a
apuntalar la recuperación económica norteamericana, sino que también, al
estimular gasto y el crecimiento, a ayudar a la economía mundial", declaró
Bernanke.
La Fed mantiene desde hace casi cuatro años
una política de tasa de referencia a nivel casi nulo.
Desde finales de 2008, la Fed ha inyectado
más de 2,34 billones de dólares en el circuito financiero para mantener las
tasas de interés lo más bajo posible a largo plazo para intentar acelerar la
recuperación económica.
A mediados de septiembre, decidió inyectar
en la economía 40.000 millones de dólares adicionales por mes y mantener esa
práctica "mientras no mejore netamente la perspectiva del mercado del
trabajo".
Esas inyecciones de liquidez generan una
tendencia generalizada a la baja del dólar en el mercado cambiario y la
política de crédito fácil de la Fed es regularmente acusada por ciertos países
emergentes, encabezados por Brasil en América Latina, de ser responsables del
flujo masivo de capitales que ejerce presiones alcistas para sus monedas
nacionales.
Sin embargo, como lo ha hecho en varias
oportunidades desde 2009, tanto en Estados Unidos como en el extranjero,
Bernanke rechazó esos argumentos al afirmar en particular "que las
relaciones de causa a efecto entre la política monetaria de los países con
economías avanzadas y los flujos de capitales internacionales son más débiles
de lo que a veces se dice".
Fuente: AFP