El exsubsecretario de Estado Adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental
destaca el avance bilateral en seguridad y comercio
Nota del editor: Aquí presentamos un esquema
periodístico de la relación México - EU realizada por CNN. Se trata de una
serie de entrevistas de CNNMéxico de cara a las elecciones del 6 de noviembre.
Consulte las entrevistas con Arturo Sarukán (en la sección TLCAN del blog),
Rosario Green, Enrique Berruga, Carlos Heredia y Larry Rubin.
Washington, EU, 31 de octubre del 2012.- La Iniciativa Mérida debe continuar en los próximos años, corregida en el
sentido que la orientó el gobierno del presidente Barack Obama: una estrategia
menos afincada en la fuerza, que considere el combate a los narcotraficantes,
pero con mayor acento en el fortalecimiento de las capacidades de justicia,
seguridad y oportunidades a nivel local, dijo Arturo Valenzuela,
exsubsecretario de Estado Adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental.
En entrevista con
CNNMéxico, Valenzuela dijo que esperaría que el próximo gobierno encabezado por
el priista Enrique Peña Nieto profundizara en la cooperación en materia de
seguridad, en aspectos vitales como el intercambio de inteligencia y la
consolidación de las instituciones en México, a partir de proyectos con la
participación del gobierno de Estados Unidos.
"Ha habido una
relación muy estrecha y en los últimos años se ha institucionalizado una
cantidad impresionante de mecanismos de cooperación. Eso no cambiará con el
nuevo presidente. Se espera que algunos aspectos se profundicen y que tal vez
se corrijan algunas cosas que no van bien", dijo Valenzuela.
Una de las principales
críticas es la lentitud con la que han fluido los recursos de la Iniciativa
Mérida. Hasta noviembre de 2011, el gobierno de Estados Unidos sólo había
aportado en equipo y entrenamiento 400 millones de los 1,400 millones de
dólares que comprendía el instrumento puesto en marcha por el gobierno del
presidente George W. Bush. A finales de aquel año, se liberaron 500 millones de
dólares, con lo que el total de la ayuda a México había ascendido a 900
millones de dólares.
En entrevista con
CNNMéxico sobre el futuro de la relación bilateral, la excanciller Rosario
Green dijo que la Iniciativa Mérida es "un papelito insuficiente" que
no refleja la corresponsabilidad de Estados Unidos en el tráfico de drogas, y
acusó al gobierno del presidente Felipe Calderón de actuar con sumisión
respecto a los acuerdos de cooperación alcanzados con el país vecino.
Valenzuela dijo que EU es
ahora más corresponsable que antes en el tema del narcotráfico, pero reconoció
que es difícil transparentar la información alrededor de la cooperación entre
ambos países.
"Esto se ha
transparentado más que antes. En otras épocas, en materia de seguridad, los
países trabajaban juntos. En la Guerra Fría, uno de los frentes más importantes
era la inteligencia militar soviética, que estaba en México, pero en temas
actuales de inteligencia es difícil transparentar porque uno pierde la ventaja
que tienen las agencias en cuanto a asegurarse que el material se mantenga en
secrecía y haya seguridad de que las contrapartes la manejarán bien. Cualquier
cooperación tiene que ser entre países iguales, respetando las soberanías, con
un esfuerzo común para asegurarse que efectivamente lo que se hace sea para
proteger a la población en ambos países".
Valenzuela ha estado muy
cerca de América Latina los últimos 20 años. En el gobierno del presidente Bill
Clinton, estuvo a cargo de la relación con México y hasta hace dos años fungía
como secretario de Estado Adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental en la
administración Obama. En su opinión, ha habido un "cambio sideral" en
la relación bilateral.
"La relación empezó
a cambiar con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, pero también
con el presidente Clinton, cuando dejó claro que Estados Unidos estaba
dispuesto a colaborar con México, con cualquier gobierno, con tal que fuese una
elección libre, transparente y abierta. Desde lo que pasó en 1988, la cosa ha
cambiado. Yo manejé la relación con México del 1993 a 1996 en el Departamento
de Estado, y hoy día la cosa es muy distinta".
"Entonces no había
diálogo entre militares, la comunicación en temas de narcotráfico era muy
difícil, lo sigue siendo en algunos aspectos, pero hoy existen puentes de
entendimiento que antes no había. Existía una distancia entre Estados Unidos y
México que ha ido cambiando en la medida en que ambos países se dan cuenta de
que se necesitan. Estados Unidos depende también de México, como un país
exitoso".
Acerca de la preocupación
que existía en la Casa Blanca hasta hace un año respecto de la posibilidad del
triunfo del PRI en las elecciones, Valenzuela dijo que el Partido
Revolucionario Institucional regresa al poder en un país muy distinto.
"El PRI es incluso
un partido muy distinto, porque se tiene que ajustar a realidades distintas al
pasado. México ha dejado de ser un país con un partido único, con un presidente
muy poderoso, una dictadura perfecta en palabras de Vargas Llosa, donde el
presidente designaba a su sucesor. El poder político está muy disperso, los
gobernadores son muy importantes. Antes el presidente designaba a todo el
mundo: parlamentarios y gobernadores. Hoy eso no ocurre".
Sobre el papel de EU en
el combate al narcotráfico, Valenzuela subrayó que por primera vez el gobierno
de Estados Unidos reconoció su responsabilidad en el problema.
"La relación de EU
en narcotráfico ocurría a través de la certificación, que surgió porque el
Congreso se lo pidió al presidente. Hoy la colaboración es multilateral, se
trabaja no sólo con México, sino con Colombia. Asumimos que hay
corresponsabilidad, que es un tema transnacional que afecta a todos los países,
que la respuesta no puede ser solo de tipo policial, que tiene que ser
integral: juventud en riesgo, los sectores sin oportunidades, la calidad de la
justicia. En eso hay una cooperación muy fuerte que no se veía en otra
época".
La senda de la estrategia
El presidente electo
Enrique Peña Nieto ha dicho que modificará la estrategia. ¿Qué debe mantenerse
y profundizarse en inteligencia, fortalecimiento de las capacidades,
transferencia de doctrinas policiales y militares?
"México tiene
responsabilidades internas y no atañe a EU decir qué debe hacer. Pero en
relación a la cooperación, las líneas generales del gobierno del presidente
Obama deberían fortalecerse. El presidente Obama propició un cambio de un
esquema absolutamente militar, a uno integral. Sí, hay que ir tras los capos, y
en eso hay que emplear inteligencia y generar confianza en ambos países, pero
también hay que fortalecer instituciones a nivel local, para sacar de las
calles a las Fuerzas Armadas".
Valenzuela también se
refirió al discurso de los presidentes de México, Guatemala y Colombia, que en
septiembre pasado pidieron a la Organización de las Naciones Unidas abrir un
debate sobre la legalización de las drogas.
"Siempre es útil
examinar distintas opciones, pero uno puede decir hacemos una cosa con las
drogas, porque hay de drogas a drogas. El cigarrillo y el alcohol es una droga,
la marihuana es una droga y tratarlas a todas igual no corresponde.
Decir que la legalización
es la bala mágica que va a resolver el problema, es absurdo. El jefe del
gobierno del Distrito Federal, Miguel Mancera, y me comentaba hace unos días el
grave problema de la juventud de la ciudad de México con el alcohol. A final de
cuentas, se trata de un problema de salud pública y la estrategia tiene que ser
integral, debe tener una visión de salud pública. No se trata solo de sacar las
drogas del mercado con policías".
La necesidad de una
reforma integral
También reconoció que la
reforma migratoria es una de las grandes promesas incumplidas del presidente
Barack Obama, y dijo que, si es reelecto, lograr su aprobación será una de las
prioridades de su gobierno.
"Es una reforma
absolutamente necesaria, debe ser integral y abordar todos los temas,
incluyendo regularizar la situación de millones de indocumentados. Es una
situación inaceptable. Al presidente Obama le tocó una mano muy difícil, la
peor crisis económica en el mundo desde la depresión de los años 30. Las
acciones que tomó fue para asegurarse que no cayera más la economía
internacional. Es una realidad que él heredó de situaciones anteriores. A mi
juicio, no hay prioridad más grande para la administración Obama, que sacar
adelante la reforma migratoria. Esperamos que el Partido Republicano se sume a
un acuerdo partidista, en lugar de seguir demonizando a los migrantes".
Dijo que en política
internacional la diferencia entre la reelección del presidente Obama y un
eventual triunfo del republicano Mitt Romney sería continuar un esfuerzo de
diálogo y acuerdos multilaterales o volver a los tiempos de la hegemonía
estadounidense en el mundo.
"Estoy convencido
que lo que enfrentó el presidente Obama era un rechazo generalizado a la
política exterior de EU en el mundo, un rechazo al unilateralismo en Iraq, un
rechazo a que no se hizo caso a México ni a Chile, que estaban en el Consejo de
Seguridad de Naciones Unidas. El gobierno ha cambiado esas políticas, está
privilegiando el multilateralismo y el diálogo con los países, con un
convencimiento de que Estados Unidos no puede imponer su poderío en forma unilateral".
"Estamos en una
época complicada y EU no puede hacer nada solo. Aquí es donde hay una
diferencia importante: Romney quisiera volver a lo que decía Bush: el poder
titánico de EU. El presidente Obama está buscando en base en los intereses
comunes, como cooperar para solucionar los problemas. Esa consigna que es
importante en Medio Oriente, también es muy importante para América Latina. La
cooperación tiene que ser genuina y abierta, y sin esa pretensión hegemónica
del pasado".
Fuente: CNN