Río de Janeiro,
Brasil, 6 de octubre del 2012.- Los bancos
brasileños tienen espacio para reducir las tasas de interés de los préstamos a
los consumidores a la mitad, dijo el ministro de Hacienda de Brasil, Guido
Mantega, en comentarios publicados el sábado por el diario O Globo.
Los bancos están sobreestimando el riesgo
de impago y el gobierno pretende mantener la presión sobre ellos para que
reduzcan las tasas, dijo Mantega según lo citó el diario.
Tasas promedio de un 40 por ciento a un 50
por ciento al año no tienen sentido en una economía con una inflación de un 4,5
a un 5 por ciento anual, dijo el ministro a O Globo.
"Los trabajadores están en ambientes
laborales más formales y pueden demostrar capacidad de ganancias, las casas se
están volviendo más estables y el riesgo en la economía brasileña es menor que
en muchas economías avanzadas", dijo Mantega al diario.
"No tiene sentido el cobrar tasas de
interés excesivamente altas", agregó.
El banco central de Brasil redujo su tasa
de interés referencial, que por mucho tiempo fue una de las más altas del
mundo, a un 7,5 por ciento en septiembre desde un 12,5 por ciento en julio del
2011. En los últimos 11 años, la tasa de interés promedio de Brasil ha sido de
un 14,72 por ciento.
El Gobierno también ha estado presionando a
los bancos para que reduzcan las tasas al obligar al Banco do Brasil SA y Caixa
Economica Federal, controlados por el Estado, a reducir sus cobros y tarifas.
Los bancos no estatales como Banco Bradesco
SA, Itau Unibanco Holding SA y bancos extranjeros como Citigroup Inc. y Banco
Santander SA han resistido silenciosamente la presión.
Las instituciones financieras afirmas que
el requisito del Gobierno para que realicen depósitos obligatorios altos en el
banco central, en un esfuerzo por ayudar a controlar la inflación, reduce el
efectivo disponible para créditos de consumo y reducir las tasas.
Los bancos también culpan a las altas tasas
de impago de los consumidores, a la falta de bases de datos sobre crédito y a
las enormes necesidades de préstamos del Gobierno como factores que limitan el
crédito a los consumidores y mantienen las tasas altas.
Mantega dijo a Globo que no lo convencen
los argumentos de los bancos.
"Por momentos, el sector financiero
nos acusa por los depósitos obligatorios, pero si ves qué es lo que más
influye, es la proyección que ellos tienen de mala deuda", dijo Mantega a
Globo. "Ellos tienden a sobreestimar la mala deuda. Es necesario actualizar
esos cálculos a hoy, para un país que es más sólido y un crédito que es más
seguro", agregó.
Fuente: Reuters